Bienvenidos a Revista Asueto, un espacio de literatura, crítica y traducción, para disfrutar de poesía contemporánea, con autores cordobeses, argentinos y de Traslasierra. Desde Villa Dolores, Córdoba, Argentina.




martes, 15 de diciembre de 2009

Poetas de Asueto en Córdoba


Integrantes de Asueto, partciparon el pasado 5 de noviembre en el Ciclo de Poesía "Palabras de Poeta", que desde hace cinco años organizan Hernán Jaeggi y Carlos Garro Aguilar. Durante la jornada, Gabriela Bayarri y Jorge Vázquez Yofre, dialogaron con el público presente sobre la historia y la actividad del grupo Asueto, que desde 1998 proyecta su actividad literaria desde Villa Dolores, produciendo poesía y editando una revista. Posteriormente ambos autores leyeron poemas propios compartiendo con los presentes los versos creados en Traslasierra.

domingo, 25 de octubre de 2009

Horacio Goslino/ Vino desde la noche...

Vino desde la noche
y se instaló en la aurora.

De su esencia de fuego
se desprendió el enigma
de las constelaciones.

Atravesó el desierto
y nos dejó una estela
de signos inconclusos
marcados en la arena.

Cayó sobre el océano
y lo tiñó de azules.
Fue marea alocada
sacudón de la atmósfera
alerta en las antenas de la sangre.

Tal vez estaba escrita su llegada
en algún viejo códice de un sueño.

Mencionaron su órbita
su desnudada chispa
la incertidumbre de su cercanía

Hablaban de un cometa.

Yo pensaba en tus ojos.


Horacio Goslino, Bahía Blanca, Buenos Aires)

miércoles, 21 de octubre de 2009

Gerardo Coria / De esa tarde...

De esa tarde
quiero el calor
de tu mano temblando,
de no saber
hasta dónde
llegará el verano.
Quiero la espuma
de la marea
que siempre vuelve
como el sol a tus ojos
y el relámpago
a mi cuerpo.

Gerardo Coria (La Falda, Córdoba, 1965)

domingo, 18 de octubre de 2009

Susana Miranda / Tren

Tren

Los sonidos antiguos
ya no se quejan.
No hay olor
a hierro,
ni pájaros
anunciando una partida.
El humo
se desvanece
en un reloj
de arena.

Susana Miranda, Villa Dolores, 1962.

viernes, 16 de octubre de 2009

Laura López/ Referencias

Referencias

Se fue el recuerdo
de donde estaba la palabra,
el árbol de ciruelas,
la hoja de anotar
los días...

se perdió el camino
de cómo llegar hasta los cerros
y la memoria
de la piedra blanca...

un subterráneo deseo
a patio llovido
en las claras nervaduras
y en la reluciente
brevedad de las gotas.

Laura López Morales, Villa Dolores, 1976.

jueves, 15 de octubre de 2009

Andrés Nieva/ Escalones

Escalones

Flores secas
igual que migas de pan
mueren sobre bancos
de cemento
en los parques.

Los escalones
de la catedral
están ocupados
por rostros bronceados
por el sol.

Los monumentos
de las plazas
inmóviles y opacas
miran lo que nosotros
no podemos ver.

Froto mis manos,
me levanto,
y me pierdo entre la gente.

Andrés Nieva (Villa Dolores, Córdoba, Argentina 1973)

domingo, 4 de octubre de 2009

Leonor Mauvecin/ Para imaginar la vida

Para imaginar la vida

he dejado que la noche me acorrale en un suspiro de luz.
Allí donde habita el silencio de la casa vacía
enhebro palabras que otros han tejido para mi.
Busco en el código, la entrelínea
y dejo que el mundo se caiga a pedazos y se hagan
añicos los cristales, donde antes se reflejaban las madres
que acunaban a sus niños con canciones de amor.
Dejo que la oscura jauría devore los intersticios de la paz
y escribo

sábado, 3 de octubre de 2009

Carlos Gómez Chapanay/ Condena

Condena

Todo ser viviente
es un condenado a muerte.

Sin embargo,
la sentencia se aplaza
y se embriaga la sed
en el infinito remanso del tiempo.
Carlos Gómez Chapanay

miércoles, 30 de septiembre de 2009

Rodolfo Godino

Bulbos


En un punto del año
el flujo de los matices
y el volumen del verde se entumecen,
bajan a los grumos de la tierra.


En el ojo,
cebado por la ilusión del clima,
eso se instala
no como muerte
sino como renuncia de la luz
y presión gris de la bóveda del cielo.


No es cierto, ni vehemente,
ese final que luce
como colmada exposición del ocre:
abajo, en el poroso,
el susurro del ciclo
impregna las escamas de las yemas
y aguarda.

Como almas fijas
esas cápsulas reservan su momento
mientras arriba, en el teatro
de la luz parcial y el aire amarillo,
se pudre otra vez
la carne regia de dalias y azucenas

jueves, 24 de septiembre de 2009

El poeta Rodolfo Godino recibió el Premio Consagración Letras de Córdoba


En la Biblioteca Córdoba, la Subdirección de Letras y Bibliotecas de Córdoba presentó el libro Beber en lo oscuro, una antología de poemas de quien resultó ganador del Premio Consagración Letras de Córdoba en 2008, Rodolfo Godino.
La publicación del libro por parte del sello Ediciones Letras y Bibliotecas es la culminación del galardón entregado a Godino, uno de los premios literarios más importantes de la provincia, instituido en 2003 y entregado en ediciones anteriores al poeta Alejandro Nicotra (2003) y al ensayista Enrique Lacolla (2005).

Un poema de nuestro amigo poeta a modo de homenaje:

Invitación

"A los que han declinado su corazón
y retornan de las ahogadas habitaciones
con la boca en cenizas,
a los que están desterrados
y no sabiendo
participan sin júbilo del mundo,
a ellos, mis parientes,
yo les digo:
vuelvan de la amarga provincia,
dejen en la puerta las palabras oscuras,
entren conmigo a la casa del fuego".
Rodolfo Rodino

Rodolfo Rodino: nacido en 1936 en San Francisco, Pcia de Córdoba, y autor de libros como El visitante (1961), Una posibilidad, un reino ( 1964); La mirada presente (1972); Homenajes (1976), Gran cerco de sombras (1982), Curso (1982), Centón (1997) Elegías breves (1999), Ver a través (2001), Viaje favorable (2004) y Diario (2008).
Entre las distinciones más importantes que recibió Rodolfo Godino se destacan el Premio Nacional de Poesía Iniciación (1961), el Premio del Fondo Nacional de las Artes (1964), Premio Municipal de Poesía (1970), Gran Premio Bienal de Poesía (1982), Premio de Poesía "La Nación" (1994), entre otros. También ha colaborado en publicaciones nacionales y extranjeras.

lunes, 21 de septiembre de 2009

Susana Cabuchi/ Oficio

Oficio
Hay horas bienaventuradas:
festejo
las figuras del polvo a contraluz,
el sabor de la lluvia.
Pero hay días oscuros
que aguardan entretanto
con nombres y con fechas.
Entonces
guardo mis muertos
en cajitas de fósforos,
de zapatos, de arroz.
Mis muertos
y mis muertes.

Nació en Jesús María, Córdoba, en 1948. Ha publicado: “El Corazón de las Manzanas” (E.
y G. López Editores, Córdoba, 1978), “Patio Solo” (Alción Editora, Córdoba, 1986),
“Álbum Familiar” (Alción Editora, Córdoba, 2000), “El Dulce País y otros poemas”
(Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de la Nación, Buenos Aires, 2004). Textos
de su autoría han sido incluidos en numerosas antologías, ensayos y estudios críticos de
poesía hispanoamericana y de literatura escrita por mujeres.

Horacio Castillo / Hice un hoyo

Hice un hoyo


Hice un hoyo en la tierra
y lloré dentro de él; lloré de bruces,
hasta que el llanto llegó al fondo,
hasta que todo se anegó,
hasta que brotó de la profundidad
un tallo que nadie hubo tocado.

Horacio Castillo

jueves, 17 de septiembre de 2009

César Vargas/ El libro de la alegría

I

“Escucha hermano la canción de la alegría”

Escucha:
El tiempo acumula sus miradas y sus pieles
pero eso no pesa
porque a veces
sólo se trata de cáscaras de olvido,
se una región sin gato y sin fantasmas.

Escucha:
Te hablan el sol y las vidrieras,
sus pastillas de menta,
sus sándwiches de miga,
el rezago de petróleo que empantana la calle.

Seguramente piensas:
Si pudiera tocar la piel
de la muchacha que sonríe
desde el afiche de perfume...

Pero escuchas.
sí, tú escuchas: el mediodía ha prendido sus motores,
el hambre te dice que estás vivo,
una mano ha temblado al servirte ese vino
y tú escuchas tu voz, que otros escuchan,
y ves que también tiembla
la mujer del afiche.

“César “León” Vargas nació en 1954 en Canals (Provincia de Córdoba), vivió algunos años en Bell Ville y reside en Córdoba desde 1974. Gritó poemas en calles, plazas, sindicatos y escuelas. Es narrador oral del miembro de “El caldero de los cuenteros” y del grupo “Venique Tecuento”.
Publicó en diarios, revistas, afiches y libros: “Antología poética”,1984; “poemas en la calle”, 1986; “El cornopio”1988; “Antología de la poesía social argentina”, 1987; “Poesía actual de Córdoba, los años ochenta”, 1990; “El Escriba de los Epitafios”, 1990; “Los cuatro sellos”, dos ediciones 1991 y 1993; “Ellas”, 1995, “EL Libro de la alegría”, 2005, entre otros.

miércoles, 26 de agosto de 2009

Pablo Anadón / La luz de la cocina en la mañana

La luz de la cocina en la mañana
cuando la casa aún está a oscuras
y todos duermen, y en los vidrios
el día es un presentimiento
parecido a la espera o a la añoranza.

La luz de la cocina cuando el sol aparece
anaranjado entre las ramas negras
y las flores celestes del jacarandá
y el hombre hace el café, hojea un libro,
se asoma al patio y piensa

que es posible que llueva,
que ya casi el la hora
de despertar a su mujer, que hay ropa
tendida en la soga, que el silencio
con olor a humedad le recuerda su infancia,
que la vejez se acerca
y el poema se aleja
y aún no sabe vivir.

Pablo Anadón

Pablo Anadón nació en Villa Dolores (Córdoba), el 29 de junio de 1963. Ha publicado, en poesía: Poemas (Colmegna, Santa Fe, Primer Premio “José Cibils” 1979); Estaciones del árbol / Stagioni dell’albero (Il Nuevo, Vecchio Stil, Córdoba, 1990, traducción al italiano de Oreste Macrì); Cuaderno florentino y otros poemas italianos (Università degli Studi della Calabria, Rende, Italia, 1994); Lo que trae y lleva el mar – Poesía 1978-2003 (Rubbettino, Soveria Mannelli, Italia, 1994); La mesa de café y otros poemas (AMG Editor, Logroño, España, 2004) y El trabajo de las horas – Poesía 1994-2004 (Ediciones del Copista, Col. “Fénix”, Córdoba, 2006).
Es autor de las antologías críticas Poetesse argentine (Plural Poesia, Acquaviva Picena, Italia, 1994), El astro disperso. Últimas transformaciones de la poesía en Italia. 1971-2001 (Ediciones del Copista, Col. “Fénix”, 2001, Premio de Traducción del Gobierno de Italia) y Señales de la nueva poesía argentina (Llibros del Pexe, Oviedo, España, 2004). Ha publicado traducciones de Dante Alighieri, Giuseppe Ungaretti (El Dolor, Alción,1994, en colaboración con Esteban Nicotra), Vittorio Sereni, Alfonso Gatto, Mario Luzi, Giorgio Caproni, Wallace Stevens, W. S. Merwin, etc.
Vivió entre 1987 y 1994 en Italia, donde fue becario en la Universidad de Florencia y docente en la Universidad de Cosenza. Doctor en Letras por la Universidad Nacional de Córdoba, vive actualmente en Alta Gracia y trabaja como profesor de Literatura Argentina y de Literatura Hispanoamericana en la enseñanza universitaria. Ha fundado y dirige desde 1997 la revista de poesía y crítica Fénix y la colección de libros del mismo nombre.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Alejandro Nicotra / El llamado

EL LLAMADO

(Emily Dickinson)


―Llamo a las palabras
como a los pájaros en el jardín,
ofreciéndoles
agua y pan de un silencio,
que se parece a mi vida.

Ellas vendrán,
si vienen, a decir su aleteo,
su trino alegre o lúgubre
en torno a mi mano:

para que yo sepa, de verdad, escuchándolas,
cuál ha sido la ofrenda.


ALEJANDRO NICOTRA

domingo, 16 de agosto de 2009

Ediciones del Copista y la Biblioteca Córdoba
tienen el agrado de invitar a la presentación del libro

De una palabra a otra, de Alejandro Nicotra

(Ediciones del Copista, Col. “Fénix”, Córdoba, 2008).



El acto contará con la participación del autor

y de los poetas y críticos

Elisa Molina y José Di Marco.



Tendrá lugar en la sede de la

Biblioteca Córdoba, 27 de Abril 375, Córdoba,

el jueves 20 de agosto de 2009, a las 19.30 hs.

La entrada es libre y gratuita.

viernes, 14 de agosto de 2009

Jorge Vázquez Yofre / El alba

El alba

Eran dos líneas promisorias
las del alba:

la mano de mi madre
abriéndome los ojos,

y su sonrisa.

Allí comenzaba el mundo.

El decía...

Él decía que algo había en el aire.
Que con ímpetu ascendía
en las horas más calladas
pujando por ser lo que tenía que ser.
Y que de eso,
tu serías el cuerpo,
y él, tu respirar.

Jorge Vázquez Yofre

María Esber / La duda

La duda

Cuando en la noche
el frío baja sobre las cumbres
y las calles,
sobre tu corazón y tus deseos,
la luz de tu cuarto
se apaga en la hora muda.

Entonces, cada lugar de tu casa
es un camino con señales
y no sabes
si es a él, todavía,
a quien esperas
o es a Ella,
con su promesa de eternidad.

María Esber

jueves, 23 de julio de 2009

Esteban Nicotra / Antes del alba y otros

El poeta Esteban Nicotra y una serie de escritos que recuerdan a desaparecidos que pasaron sus días finales en el centro de detención de “La Perla”.

Antes del alba

He sufrido.
Pero he defendido
mi alegría con franqueza
y generosidad.
No he sabido, ni querido,
medir mi vida,
ni calcular.
Estoy solo,
con mis pocos semejantes.
Bendigo mi entrega
a mi pasión
innegociable.


En el galpón

Uno al lado del otro acostados
como larvas esperando la muerte.
Las vendas inútiles
sobre los ojos que miran
hacia adentro.
El sudor de la fiebre
y el pus en las heridas.
La desgarrada sonrisa
vuelta hacia el futuro.


Hasta que resuciten

Somos los fantasmas vivientes
de aquellos muertos.
No viviremos nuestras vidas
hasta que no descansen en paz.
Sólo los olvidaremos
cuando resuciten
en cada uno de nosotros.


Esteban Nicotra (1962). Ha publicado los libros de poemas La vida que se vive (1992) y La vida que se vive (Brujas, Córdoba, 2006). En ensayo: La realidad en la palabra Escritores italianos del siglo XX y nuestros días (Brujas, 2005) y Ser el otro (Brujas, 2007). También ha traducido por primera vez al castellano, entre otros, libros de escritores italianos como Empirismo herético y Dal diario (1945-47) de Pier Paolo Pasolini, Por un segundo o un siglo de Maurizio Cucchi, Gente al paso de Tiziano Rossi (Atuel, Buenos Aires, 2002). Ha cuidado y prologado la edición de la poesía completa del poeta argentino Horacio Castillo, Por un poco más de luz Obra poética (1974-2005).

jueves, 16 de julio de 2009

Gabriela Bayarri / Litoral

Litoral

Llueve
y llevamos mojada
la mirada.
Hace días que llueve,
y parecen del color del barro
el camino, el cielo,
el río y la gente.
Llueve.
Las gotas transcurren
por la corteza
de los árboles.
Llueve,
y algo de nosotros
se va con el agua.

Alejandro Nicotra / Imagen

Imagen

Eres como la poesía
que nunca escribiré. Indecible,
te vestí, sin embargo, de palabras iguales a la noche,
puse en tu mano el anillo de un adiós.

Pero es desnuda como me acompañas.

Azimut

De mí a tí, el arco
de casi toda una existencia, lloras en sombra, horas en claro.
(Días, noches escritas:
pulso y letra.)
Ahora tu nombre se parece al de mi muerte.
Cuerpo celeste, contemplado desde un cuerpo de tierra.

Alejandro Nicotra (Sampacho, Cba., 1931). Ha publicado, entre otros, los siguientes libros de poesía: Detrás, las calles (Colección Adonais, Ediciones Rialp, Madrid, 1971); Puertas apagadas (La Ventana, Rosario, 1976); Lugar de reunión (Taladriz, Bs. As., 1981); El pan de las abejas y otros poemas (El imaginero, Bs. As.; 1983, Ensayo y antología de Ricardo H. Herrera); Desnuda musa (Alción Editora, Córdoba, 1988); Hogueras de San Juan (El Imaginero, Miramar, 1993); Il pane delle api e altre poesie (Centro Intemazionale della Gráfica di Venezia, 1993, traducción al italiano e introducción de Franco Avicolli); Poesía /1976-1993 (Alción Editora, Córdoba, 1994). Entre otras distinciones, Gente de Letras le otorgó, en 1991, el premio "Esteban Echeverría" por el conjunto de su obra. Es miembro correspondiente de la Academia Argentina de Letras.

Antonio Requeni / El vaso de agua

El vaso de agua

Cuando me acuesto, desde que era niño,
pongo a mi lado un vaso de agua.
A1 apagar la luz, si lo contemplo
brillar en la penumbra, me imagino
que el agua es otro nombre de mi madre
y estoy seguro de que, ya dormido,
alumbrará el acuario de mis sueños.
Sombra, misterio, música nocturna
que bebo a lentos sorbos o me bebe.
¿Eres tú quien me sueña en ese extraño
país donde algún día nos veremos?
¿Dormir es un ensayo de la muerte?
Por las mañanas, cuando me recuerdo,
muchas veces el vaso está vacío.
Y vuelvo, desganado, a la rutina
de calles y de rostros, mientras llega
1a oscuridad, el rito silencioso
de llenar nuevamente el vaso de agua
para ponerlo al lado de mis sueños
y saber que allí estás, que me proteges,
que hay algo puro en medio de la noche.

Osvaldo Guevara / Alas

ALAS

En la plaza con flores
mi hija agranda sus alas.

Hamacándose
casi
alcanza el azul.

Me inquieto viéndola
Remontarse o descender
como sobre una
correntada
pero pienso que un ángel infantil juega a su lado
bajo el sol matinal que esplende como un copón de eucaristía.

Y en tanto revolotea y gorjea
voy sintiéndola cada vez más a salvo de la tierra
y sus bocas siempre hambrientas.

miércoles, 24 de junio de 2009

Esteban Gabriel Nicotra

EN MEMORIA

Me basta este cuadrado del cielo
Para entender que eres infinito.

Sin saberlo, te he dedicado mi vida,desde aquella sombra
por el bosque de los álamos,
v el ritual del fuego
en la hojarasca.

(Los párpados cerrados presienten a los muertos, la música los trae
v viven como formas borrosas:
estas palabras van buscando sus rostros .)

Eras el temblor de los árboles, las figuras del humo,
la luz de un gesto.

jueves, 28 de mayo de 2009

10° ANIVERSARIO: Presentamos edición N° 25




Al cumplirse diez años de la Revista Asueto hojas de poesía, que iniciara su actividad en abril de 1999, el pasado viernes por la noche, se presentó en el Centro Cultural Cooperativo, la edición número veinticinco.
El acto contó con la presencia de un público interesado en las manifestaciones poéticas: escritores, docentes e invitados especiales tales como Miguel Angel Ortiz, periodista, escritor y presidente actual de tardes de la biblioteca sarmiento, y de Susana Miranda, docente y poeta, quien ha editado ya dos libros de poesía. Ambos autores locales fueron invitados a participar de esta edición, que se distribuirá en distintas provincias, en entidades culturales, universitarias y entre los miembros de la Academia Argentina De Letras.
En esta nueva publicación se presentan poemas de Rodolfo Godino, permanente colaborador de Asueto reconocido en 2007 con el Premio Consagración Letras de Córdoba. Otro de los invitados a la edición es José Di Marco, profesor de la Universidad de Río Cuarto, y una prosa del notable poeta, traductor y ensayista Rodolfo Alonso. Se incorporan desde este número una Página de la Memoria, dedicada a rescatar a los escritores que marcaron los distintos movimientos literarios del siglo pasado, en esta oportunidad Leopoldo Lugones.
El encuentro fue propicio para la lectura de poemas de distintos escritores y de los propios miembros del grupo: Osvaldo Guevara, Alejandro Nicotra, Jorge Vazquez Yofre, Ana Tibaldi, Tita Esber y Gabriela Bayarri.